MALTRATO ANIMAL: UN CRIMEN LEGAL



ESTA PÁGINA CONTIENE IMÁGENES MUY DURAS Y TEXTO QUE POR SU CRUDEZA, PUEDE RESULTAR DESAGRADABLE Y HERIR LA SENSIBILIDAD. TANTO LAS FOTOGRAFÍAS COMO LO QUE SE HA ESCRITO NO HACE MÁS QUE MOSTRAR UNA REALIDAD BRUTAL, PERO SI CONSIDERA QUE PUEDE VERSE AFECTADO AL CONTEMPLAR LO QUE AQUÍ SE EXPONE, NO SIGA ADELANTE.

Quien asume la tortura y el asesinato de otros seres como algo ajeno, es tan responsable como el torturador y el asesino.

"Los hombres son nazis para los animales y su vida es un eterno Treblinka". (Isaac Bashevis Singer- Premio Nóbel).

Después de que todo se haya dicho y hecho, quedará mucho más por hacer que por decir. (Jane Goodall)

Ante la injusticia la cobardía se viste de silencio. (Julio Ortega)



lunes, 5 de abril de 2010

La sociedad frente al animalismo

Dejen, por favor, de anunciarnos como liberticidas, los derechos que les negamos se siembran en el especismo, se abonan con la ignorancia y engendran muertos. Llámenlos por su nombre: bulas para el crimen. No nos acusen de violentos, no son nuestras las manos que con sangre ajena, escriben los siniestros renglones de sus tradiciones ni el saldo de sus negocios. ¿Quién empuña el rifle, la espada o la lanza? Siempre ustedes.


Tampoco sigan afirmando que despreciamos al ser humano. Nuestros hijos lo son y no queremos para ellos un mundo en el que el padecimiento de criaturas sensibles sea arte, diversión y comercio. Claro que nos importan las mujeres y los hombres, precisamente por eso, renegamos de su alienación y rechazamos que la educación, los hábitos y el sistema mercantil, los reduzcan a testigos mudos y a cómplices de tanta degradación.


No, no creemos que el Planeta lo haya diseñado Walt Disney, ni que los cerdos hablen o que los perros toquen el violín; no necesitamos “humanizarlos” para entender que no es justo que los sometamos, torturemos y asesinemos. No somos cretinos ni confundimos fantasía con realidad; justamente es nuestra cordura, la que nos permite comprender que un gemido, un gruñido, un chillido y hasta el silencio, también son gritos de angustia.

Esto es muy sencillo, aunque quieran perderse en todo tipo de disquisiciones morales o pragmáticas pervirtiéndolas a su conveniencia para distraer de lo esencial. No se trata de ustedes o de nosotros, sino de ustedes, de nosotros y de ellos. Porque sí, ellos también cuentan, los animales a los que denigran, atormentan y matan, son al fin las víctimas de su crueldad y los eternos ignorados. Les imponen la condena pero les niegan la voz.


Tampoco necesita rugir de sufrimiento el mar que se contamina ni emitir alaridos de angustia el árbol envuelto en llamas, no hace falta ver sangrar al ozono por los bordes de su herida para admitir lo estremecedor una destrucción de la que el hombre es el único culpable. Nada justifica que hayamos convertido nuestro entorno en una suerte de basurero y de patíbulo en el que los racionales, nos erigimos en jueces y verdugos.

No, los animalistas no somos un peligro social. Animalismo y humanismo se dan la mano; el problema es que les inquieta que un toro o un mono posean los mismos derechos fundamentales que ustedes si con ello, pierden la inmunidad para martirizarlos o aniquilarlos. El maltrato a los animales es una lacra de nuestra sociedad, como tantas que ha habido, y sus argumentos para perpetuarlo no son más que las razones del tirano.

4 comentarios:

Ricardo Muñoz José dijo...

El ser humano es el dueño del planeta. Una potestad otorgada, según dicen, por un dios. El hombre puede parcelar la tierra y especular a gusto, esquilmar las selvas, robar la riqueza del mar, contaminar el aire, reventar la capa de ozono, o esclavizar a otros hombres, siempre que en ello el dinero ocupe la mira de su obsesión.
Estamos en manos de depredadores asesinos. Ellos tienen las armas y tienen sus acólitos dispuestos a usarlas para engordar el bolsillo del amo.
Total, ¿los árboles se quejan? ¿Los animales tienen voz? ¿El agua o el aire llaman a la rebelión? ¿La capa de ozono encabeza manifestaciones de protestas? ¿Los sometidos van a levantarse siendo que sus estómagos dependen de la comida del poderoso? ¡No! Nada cambia y ellos a engordar y reírse del sometimiento ajeno.

Y nosotros, los animalistas, en el medio. Somos peligrosos. Violentos, incivilizados. Aunque no tengamos armamento, nuestras voces contaminan el interés económico de un grupo, y por tanto, atentado es atentado, ¡somos casi terroristas!
Ellos saben que no sólo defendemos a los animales. También amamos la paz, y el entendimiento entre los hombres y los pueblos, Pero eso no vale. ¿Defender al visón cuando la industria peletera necesita un entorno de mudez? ¿Luchar contra las corridas de toros, siendo que muchos millones están en juego? ¿Protestar contra el toro de la Vega, el toro embolado, o el toro de Medinaceli, siendo estas expresiones “culturales” el circo del pueblo, y un pueblo idiotizado rinde más y no pregunta?

Y pensar que todo nació el día que el hombre primitivo con un garrote mató al bisonte, y automáticamente descubrió que con el mismo palo podía matar al adversario y robarle sus pertenencias…

Julio, para que las cosas cambien, deben cambiar ellos, no nosotros. La sangre, el asesinato premeditado, el saqueo, la intolerancia, la muerte por diversión, y la paulatina destrucción del globo señalan a los que defienden las “tradiciones”, a los que aseguran que “matar es arte y es cultura”.

No obstante, por más que despotriquen contra nuestra lucha, seguiremos en la barricada. No podrán contra nosotros. Tenemos algo que ellos nunca tendrán; el ejemplo de entrega, amor y solidaridad.

Un abrazo.
Ricardo – Linde5

Anónimo dijo...

respetemos a los animales =)

Anónimo dijo...

sera dificil respetar a algo ke nos da tanta felicidad como es la naturalexa fauna flora etc... acaso ellos nos dañana para nosotros dañarlos o maltratarlos solo por estar en la punta d la cadena alimentisia solo s ke debmos respetar i cuidar akello tan maravilloso ke son los animales i el mundo!

Anónimo dijo...

sera dificil respetar a algo ke nos da tanta felicidad como es la naturalexa fauna flora etc... acaso ellos nos dañana para nosotros dañarlos o maltratarlos solo por estar en la punta d la cadena alimentisia solo s ke debmos respetar i cuidar akello tan maravilloso ke son los animales i el mundo!